«La verdad es que ningún factor hace que una empresa sea admirable. Pero si me viera obligados a elegir el que marca la mayor diferencia, elegiría el liderazgo».
– Warren Bennis, consultor organizacional y autor.
El liderazgo es especialmente crítico cuando las organizaciones tienen que adaptarse a entornos desafiantes.
Cuando los tiempos son buenos, liderar una empresa o un equipo es emocionante. Los recursos son abundantes, los clientes están satisfechos y las oportunidades están en todas partes. Sin embargo, cuando las condiciones económicas son desafiantes, esta emoción y energía positiva pueden debilitarse. Las personas sienten las presiones del trabajo y temen por sus trabajos.
¿Sabes cómo liderar en tiempos difíciles? A continuación te damos 3 consejos para lograrlo.
CONSEJO #1: Crea nuevas oportunidades.
Una recesión es a menudo una oportunidad para reagruparse, repensar y renovar la manera de hacer las cosas, para lograrlo:
- Revisa tu estrategia.
- Lidera con el ejemplo.
- Agrega valor.
- Crea un modelo comercial más sólido para el futuro.
- Implementa un plan de mejora continua.
CONSEJO #2: Comprométete con tu equipo.
Utiliza este tiempo para reforzar lo importante que es tu equipo y desarrollar las habilidades que necesitan para ayudar a la empresa a sobrevivir.
- Invierte tiempo en la formación de habilidades de liderazgo.
- Sé creativo con el reclutamiento y la retención.
- Aborda el bajo rendimiento.
- Construye un lugar de trabajo motivador.
- Trata a las personas de manera justa.
- Fomenta las buenas relaciones en el trabajo.
CONSEJO #3: Proyecta energía positiva.
Los buenos líderes brindan esperanza y visión a su equipo. Te recomendamos:
- Esperar grandes cosas de tu equipo.
- Mantenerte en contacto con tus colaboradores.
- Ser visionario.
RECUERDA:
El liderazgo durante los buenos tiempos económicos tiene sus desafíos, pero esos desafíos aumentan cuando el entorno es desafiante y las personas están más preocupadas por mantener sus trabajos y pagar sus deudas.
En estas condiciones, los líderes y gerentes deben vigilar su entorno, prepararse para la recuperación, apoyar a su gente y proyectar entusiasmo y energía.
¡El liderazgo es fundamental para el éxito de la organización, así que utiliza todos los recursos y herramientas disponibles que tengas!